Dado que pasamos un tercio de nuestras vidas durmiendo, es seguro decir que dormir es crucial para una vida saludable. Despertarse después de una noche de mal descanso puede hacerte retroceder, afectando la concentración, el estado de ánimo y la salud física a largo plazo. A medida que más personas buscan establecer horarios de sueño saludables, la tecnología desempeña un papel cada vez más importante para ayudarlas a comprender y ajustar sus hábitos de sueño.
Te puede interesar: ¿Las mujeres tienen más dificultades para conciliar el sueño que los hombres?
En busca de respuestas sobre la importancia del sueño y cómo la tecnología puede influir en ello, exploramos la investigación y el conocimiento de la Dra. Vanessa Hill, científica del comportamiento del sueño. Su trabajo se centra en el período previo al sueño, las rutinas nocturnas y los hábitos saludables que pueden favorecer un sueño reparador. Además, la Dra. Hill está particularmente interesada en la relación entre el sueño y la tecnología, así como en las estrategias para reducir la exposición a la luz azul antes de acostarse.
El sueño y la salud
El sueño es un factor enorme que afecta nuestra salud y bienestar, y es uno que podemos controlar. La duración y la calidad del sueño influyen en nuestro estado de ánimo diario, nuestra productividad y memoria, e incluso en la recuperación muscular después del entrenamiento. En última instancia, dormir bien es crucial para nuestra salud integral y está intrincadamente relacionado con otros factores, como la actividad física. El equilibrio adecuado entre estos diferentes elementos es esencial para nuestra salud física y mental en general.
Hábitos diurnos y nocturnos
Los comportamientos diurnos y nocturnos desempeñan un papel crítico en la calidad de nuestro sueño. Actividades como el uso del teléfono para navegar por las redes sociales o trabajar antes de acostarse pueden prolongar el tiempo necesario para conciliar el sueño y aumentar los despertares nocturnos. Por otro lado, desarrollar hábitos diurnos saludables, como la actividad física o la meditación, puede conducir a un sueño más reparador con menos interrupciones. Las métricas clave utilizadas para evaluar la calidad del sueño incluyen la latencia (el tiempo que lleva quedarse dormido), la duración del sueño, los despertares nocturnos y la fatiga diurna. Estas métricas, en conjunto, proporcionan una imagen integral de la calidad general del sueño de una persona.
Consejos prácticos para mejorar la calidad del sueño
Para mejorar la calidad del sueño, la Dra. Hill ofrece dos consejos fundamentales. En primer lugar, es esencial incorporar hábitos de manejo del estrés, como la meditación, llevar un diario o escuchar música, durante el día o antes de acostarse. El estrés puede tener un impacto significativo en la calidad del sueño, y estas prácticas pueden ayudar a reducirlo. En segundo lugar, la actividad física es clave. Salir y moverse, especialmente al aire libre por la mañana, puede mejorar la calidad del sueño al combinar los beneficios del ejercicio con el impacto de la luz natural en la regulación de nuestro ritmo circadiano.
Los dispositivos portátiles, como la serie Galaxy Watch6, tienen el potencial de revolucionar la forma en que medimos y mejoramos la calidad de nuestro sueño. Si bien el simple seguimiento del sueño puede ser útil, la tecnología va más allá. Los Factores de Puntuación del Sueño y el Sleep Coaching personalizado en la serie Galaxy Watch6 ofrecen una visión profunda de cómo nuestras acciones diarias afectan la calidad del sueño. Al rastrear y analizar ciertos hábitos, los usuarios pueden obtener información valiosa que les permitirá tomar medidas concretas para mejorar su sueño.
Tecnología y sueño
La Dra. Hill vislumbra un futuro emocionante para los dispositivos wearables relacionados con el sueño. En particular, espera ver una mayor integración de información sobre la relación entre la actividad física y la calidad del sueño en aplicaciones como Samsung Health. Esto permitiría a las personas adaptar sus rutinas de ejercicios para mejorar su sueño sin afectar negativamente su salud. Además, la investigadora anhela insights más significativos sobre los cronotipos, es decir, la preferencia biológica de las personas por el momento del sueño. Con un análisis en profundidad de los cronotipos, los usuarios podrían anticipar cuándo tendrán la máxima energía durante el día.
Como investigadora del sueño, la Dra. Hill ofrece un consejo final para aquellos que buscan mejorar su calidad de sueño. Recuerda que cada persona tiene sus propias rutinas y hábitos a la hora de dormir. Para obtener un sueño de calidad, establece una hora para acostarte y trata de respetarla tanto como sea posible. Además, utiliza el modo de suspensión en tus dispositivos electrónicos para silenciar notificaciones y atenuar las pantallas, creando un ambiente de sueño perfecto y eliminando distracciones e interrupciones innecesarias.
Lee más: Llevar un diario del sueño: clave para identificar tus patrones al dormir